Pago en diferido de premios

Las Puertas de la Percepción

Las Puertas de la Percepción

El pasado sábado 9 de marzo de 2013 tuvo lugar en la Ilustre Casa de Cultura de Caudete una entrega de premios enmarcados dentro de las actividades del ecuador festero. La situación económica actual no está para dispendios pero como el pan y el circo conviene mantenerlo para aborregamiento de las masas se imponen medidas de choque para poder celebrar estos eventos sin coste, y a su vez ganar algo de liquidez.

Fulgencio Escámez fue con sus cuatro hijos al acontecimiento, ya que la clase del mayor había sido la ganadora del II Campeonato de Peonzas Hellblade (las de madera ya no se llevan) dotado con 100 euros para material escolar y/o viajes.

Al entrar al evento se le solicita el pago de una entrada para ver la gala de 3 euros por cabeza. Fulgencio, sorprendido, pregunta al conserje si los niños deben abonar el pago, siendo la respuesta afirmativa por parte del conserje.

Fulgencio recordó a su cuñao que vive en Valencia, que le contaba de un circo al que había asistido en la ciudad del Turia y cuya entrada valía su peso en oro. Miró dentro de la sala, esperando ver si es que el Cirque du Solei había aterrizado en la Villa, pero no. Había payasos y luces, pero ningún cuerpo atlético ni maquillajes deslumbrantes. En su lugar la gente del pueblo de siempre presentando dignamente una gala como tantas otras veces pero que ahora costaba 3 euros por cabeza.

Sacando la cuenta de la vieja, como su padre le enseñó y que éste aprendió del suyo y éste del suyo hasta remontarnos a los tiempos en que Caudete era Capdetum, calculó que los premios se estaban pagando con las entradas del respetable, una jugada maestra de una mente maquiavélica. Una jugada que para muchos hasta parecerá normal y otros ni se lo habrán planteado. Pero algunos como Fulgencio con su cuenta de la vieja contarán a sus hijos de los días en que se empezó a cobrar hasta por usar la luz del sol para ver.